El pasado 8 de Diciembre, fecha del 32º aniversario de su consagración al Señor, Dolores Báez, anunciatina de Sevilla ha tenido a bien compartir esta bonita reflexión.
Una larga historia la nuestra, llena de recuerdos guardados en el corazón.
A mis años ya he visto la vida, la sigo experimentando y la conozco.
Sabemos lo que nos ofrece y lo que podemos dar. Hemos soñado y al despertar, hemos visto rotos muchos sueños, otros se han hecho realidad.
Gratificante, gratificante experiencia.
Somos memoria continuada y ahora toca ofrecer testimonio de vida. El Señor nos hace levadura capaz de transformar, y sal capaz de preservar del derrumbe, nos hace luz capaz de romper las tinieblas de la confusión y de los miedos.
En el camino desde la madurez hacia la plenitud nos han de acompañar la gratitud, la fidelidad, el servicio y levantar las manos al que nos da la vida ¡EL Señor!
Dolores Báez