viernes, 25 de enero de 2019

Agradecimiento a Dios por la vida de Dolores Báez

Te damos gracias Señor por nuestra Hermana Dolores Báez, nacida el 9 de abril del 1936. Ella ha sido un regalo para nuestro Instituto "Virgen de la Anunciación", una de las diez ramas de la Familia Paulina, y que el pasado 11 de enero del recién estrenado 2019, retorno al Paraíso tras una larga enfermedad.
Dolorcitas, como la llamábamos quienes la conocíamos,  ha sido una persona admirable para nosotras, tenía un largo recorrido en la Familia Paulina, era una mujer de acción y apostolado en su Parroquia, en Sevilla,  trabajó en la Pastoral de enfermos y coordinaba y acompañaba a los diversos grupos.
Siempre estarás presente en nuestras vidas, por tus muchas cualidades, por tus chistes graciosos y tus chascarrillos y por tu manera de ser.
Te echaremos de menos, físicamente, porque por la fe sabemos que nos estás acompañando desde el Paraíso, donde hoy estás disfrutando y seguramente bailando al Señor esas sevillanas que tan bien bailabas.
Con tu familia, estás gozando de la presencia de Dios, junto a tus familiares de los que tanto te acordabas y a los que tanto has querido.
Para ellos, para nosotros y para las personas que conocías, siempre has tenido un sitio en tu corazón, mostrándonos tu aprecio, por eso, aunque sabemos que estás en el Paraíso, echamos de menos tu presencia física, pero damos gracias a Dios porque te ha llevado a gozar con Él en su Reino, y te has reunido con tu querida familia, a la que tanto amabas y amas pues ya estás con ellos. 
Para nosotros esta separación no podemos sentirla como una pérdida, pues por la fe, sentimos el auxilio y podemos decir que "todo lo puedo en Aquel que me conforta", y tú ya sabes que  nos conforta quien te confortó a ti, en los momentos duros de la vida, Jesucristo el Maestro, el Esposo.
Fuiste una de las tres primeras consagradas en nuestro Instituto en España. 
Dios está bendiciendo tu labor y nosotras te imaginamos llena de gozo, hasta inclusive saltando de alegría. ¡Cómo te gustaba saltar, bailar y tocar los palillos, que así se llaman en tu querida Andalucía a lo que en otros lugares de España llamamos castañuelas y que tan bien sabías tocar!
Bendito sea el Señor y bendita sea su Santísima Madre que te llevó el viernes, día que recordamos la Pasión del Señor y quedaron tus restos en la tierra de este mundo en domingo, día del Señor, y tú ya gozabas de este día como nunca pudiste imaginar gozando de la presencia del Padre, hijo y Espíritu Santo y de la Santísima Virgen. Gracias Señor por el regalo de estos años de nuestra Hermana Dolores. Amén

Paqui Rodríguez Fuentes