jueves, 23 de julio de 2020

SONETOS: PREGUNTAS


Quizás nos habíamos acostumbrado a vivir sin preguntas, nos bastaba simplemente ser un “almacén de respuestas”, quizás a preguntas que nadie se hacía. La pandemia que vivimos nos ha sacado de la pereza de nuestro “acostumbramiento” a vivir sin preguntarnos. Nos encontrábamos “demasiado” seguros de todo. En la Oración del 27-3-2020, el Papa Francisco nos ayudaba a pensar: “La tempestad desenmascara nuestra vulnerabilidad y deja al descubierto las falsas y superfluas seguridades con las que habíamos construido nuestras agendas, nuestros proyectos, nuestras costumbres y prioridades. Nos muestra cómo habíamos dejado dormido y abandonado lo que alimenta, sostiene y da fuerza a nuestra vida y a nuestra comunidad. La tempestad pone al descubierto todos los intentos de ‘empaquetar’ y olvidar lo que nutrió el alma de nuestros pueblos; todas las tentativas de anestesiar con  aparentes rutinas 'salvadoras’, incapaces de referirse a nuestras raíces y evocar la memoria de nuestros ancianos, privándonos así de la inmunidad que necesitamos para hacer frente a la adversidad” “Pues que tus muchas preguntas te lanzan - a abrirte de manera inacabada - a respuestas que a Dios no lo rechazan.


No te asusten preguntas que se agolpan
y en tu interior te dejan muy confuso,
pues fue Dios quien en tus adentros puso
inquietudes que nadie las acota.

En tiempo de pandemia son las gotas
que vencen la pereza del desuso,
y sin tener ningún miedo al abuso
horadan la dureza de tus rocas.

No te acompleje ser piedra perforada
por tantos “porqués” que te atenazan.
Teme más a tu consciencia acallada.

Pues que tus muchas preguntas te lanzan
a abrirte de manera inacabada
a respuestas que en Dios también abrazas.

P. Pedro Jaramillo
Parroquia de San Juan de la Cruz (Guatemala)