Teniendo humildad de corazón
en todo, el estudio aportará los
conocimientos necesarios, de
los cuales, ampliados en la luz
del Espíritu Santo y vividos con
fe profunda, nace el celo. De
modo que todo lo que se
aprende se vuelve medio e
instrumento de apostolado.
Consideremos así este año
la carta a los Romanos.
Beato Santiago Alberione