Muchos piensan solo en
instruirse y creen que baste
leer, escuchar bonitas
conferencias....; pero así, al
faltar la disposición de
humildad, faltando la necesaria
oración, atienden a la Palabra
de Dios con gozo, quizás, pero
como falta la gracia, no llegan a
los buenos propósitos.
Beato Santiago Alberione