Renovar la fe, la esperanza y la caridad
Sábado después de ceniza
No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores a que se conviertan
(Lc 5, 27-32)
La revolución permanente:
un Dios que ha venido para buscar
a los malos, a los pecadores...¡A mí!
¿Miro a los demás con los ojos
de misericordia y de ternura de Jesús?