miércoles, 2 de junio de 2021

Algunas características de San José II

 Tras un largo tiempo sin publicar más entradas sobre San José, retomamos la publicación continuando con los siguientes apartados

     La "justicia" - que equivale a decir: "santidad"- de san José consiste sobre todo en la disponibilidad a cumplir fielmente y con alegría la voluntad de Dios. Por obediencia, se entrega a realizar un proyecto que lo trasciende. Su justicia no consiste en la observancia escrupulosa de los mandamientos, sino en la búsqueda integral de la voluntad de Dios. Así comienza para José una vida nueva, en la que descubre un sentido profundo de su ser esposo y padre. Su responsabilidad se expresa  en el gesto de dar nombre de Jesús, al hijo de María, como lo había ordenado el ángel. A través de él, Jesús puede ser reconocido como descendiente de David como el "Enmanuel", el "Dios -con- nosotros", profetizado por Isaías. Ciertamente, todo esto está envuelto en el misterio al que solo puede accederse por la fe.  José destaca precisamente por la fe, que le merece el título de "hombre justo".

            En el evangelio de Mateo, cada vez que entra en escena la persona de san José, se descubren tres aspectos que se entrelazan: es el hombre de los sueños, el obediente que acoge íntegramente la voluntad de Dios que sabe cuidar de veras de las personas que se le han encomendado. Sabe acoger el sueño de Dios , que se implicó totalmente en la salvación de sus criaturas. Obedeció inmediatamente a las órdenes del ángel: "acogió a su mujer", "hizo lo que le había mandado el ángel", "tomó al niño y a su madre de noche"... Todo esto retrata a un hombre que ha descubierto el amor de Dios a la humanidad y ha experimentado la seriedad de su decisión de ser el "Enmanuel". De esta convicción nace la fuerza para cuidar y acoger consigo a María y al Niño.