Después que Jesús fue
bautizado y estaba orando, se
abrieron los cielos y se dejó oír
la voz del Padre celeste,
que reveló, manifestó (epifanía
significa manifestación) a
su Hijo... Era como una
presentación a los hombres
para que le escuchasen,
le siguieran (APD57,11)
Beato Santiago Alberione