Amad a este Dios que por primero os ha amado, y desde toda la eternidad os tiene presentes. Él os ha hecho nacer de familias piadosas, en un país cristiano; os ha inoculado tantas buenas inclinaciones; os ha dado la gracia de la vocación. Amad a este Dios que tanto os prefiere (APD47, 494).
Beato Santiago Alberione