Jesús guarda silencio, callando amorosamente según su estado eucarístico; así Jesús amaestra y vive... Frecuentando, como hacéis, la compañía de Jesús en la Visita, en la Adoración, debéis aprender pronto a vivir como él. Vuestro modelo más atrayente, más perfecto es Jesús Hostia (APD47, 522).
Beato Santiago Alberione