Quien se propone alcanzar la santidad y siempre reemprende el camino, no obstante las dificultades…, diciéndose cada día “hoy empiezo”, ¡es fuerte! Quienes se dedican al apostolado y no miran ni a derecha ni a izquierda los obstáculos surgidos sino que caminan adelante, ¡son fuertes! (Pr 2, 113).
Beato Santiago Alberione