Hay necesidad de tener un corazón apostólico... Nosotros no hacemos vida de clausura en su sentido estricto; nosotros debemos llegar a la gente: tal es nuestro deber, nuestra vocación. Tenemos que llevar doquier el uso de los medios más rápidos y fecundos para sembrar la doctrina de Jesucristo (Pr 5, 164).
Beato Santiago Alberione