Semana del amor: tiene su centro el Viernes Santo, día en el que más que los demás realiza lo de “nos amó y se entregó por nosotros”. Está precedido por la efusión de amor que es la institución de las santísima Eucaristía. Le sigue la culminación triunfal de ese mismo amor, conmemorado el Domingo de Resurrección (APD47, 202).
Beato Santiago Alberione