¡Bendito seáis, Dios mío! Como la vida natural viene de la madre, así viene de María la vida sobrenatural… Donde entra María entrará también Jesús. Quien encuentra a la madre halla al Hijo. Por María, el camino es seguro y corto. Jesús nos precede con el ejemplo: él se hizo hijo de María (PR 298).
Beato Santiago Alberione