Pequeño apóstol de la comunicación social.
Modelo para todos los jóvenes que aspiran a la vida paulina
Mayorino Vigolungo nació en Benevello (Cuneo, Piamonte el 6 de mayo de 1904 de una familia de campesinos humildes, ricos de fe
Inteligente y de temperamento vivaz, quería ser el primero en todo: en el estudio, en el juego, en el trabajo y en la bondad.
Cuando era niño se encontró con el P. Alberione. Mayorino se confió a su orientación espiritual, dejándose entusiasmar por tres cosas que se convirtieron en su ideal: alcanzar pronto la santidad, hacerse sacerdote y llegar a ser apóstol de la buena prensa.
Su programa de vida: progresar un poquito cada día, al que fue siempre fiel hasta su muerte.
A los catorce años cumplidos, afectado por una grave enfermedad, respondía al P. Alberione que le preguntaba si quería curarse o ir al cielo: "Quiero hacer la voluntad de Dios".
El sábado 27 de julio de 1918, en Benevello. Mayorino dejaba la tierra para irse al cielo. Sus últimas palabras fueron: " Salude de mi parte a todos mis compañeros, que recen por mi y que un día volvamos a encontrarnos todos juntos en el cielo"
El 28 de marzo de 1988 fue proclamado venerable.
Nota: en la etiqueta “Oramos
por la glorificación de nuestros modelos”,
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