Loli una de las tres primeras anunciatinas españolas, ha querido compartir con nosotras la experiencia que ha vivido en Roma.
Hemos tenido en Roma desde el
25-27 el primer encuentro de tres que tendremos este año Internacionalmente de
Institutos Agregados a la Sociedad de San Pablo.
Antes previamente habíamos hecho
un cuestionario bastante largo sobre temas importantes de los Institutos como:
la Identidad de los Institutos Agregados, la Espiritualidad, la Formación, el
Apostolado, la relación con la SSP y con la FP… y otros. Me ha sorprendido que
hayan contestado tan sólo 400 miembros de los cuatro Institutos: Jesús
Sacerdote, Santa Familia, Gabrielinos y Anunciatinas, cuando en las
estadísticas del 2015 dan 3.749 miembros entre los cuatro. Claro que puede que
sólo hayan contado con los miembros de Europa-Congo. Aun así las mayores cifras
son de Italia.
Deberíamos tomar conciencia de lo
importante que pueden resultar estos encuentros si los aprovechamos bien, pues
en ellos se cuece nuestro futuro. La cuestión es, si queremos caminar fieles a
nuestra vocación paulina de vida secular consagrada o dejamos que la inercia
nos lleve por cualquier camino que no es el nuestro.
Siempre hemos necesitado caminar
juntos, al menos, en lo esencial, como Instituto en los temas de
espiritualidad, formación, apostolado y vida consagrada en el mundo. Hasta
ahora cada circunscripción tiene su propia formación y su propio camino sin la
experiencia de los más veteranos y aquellos que conocieron al Primer Maestro y
al mismo tiempo cada Delegado Provincial o Regional da los temas que cree
conveniente con el peligro de quedarnos un poco cortos. Necesitamos ir a las
raíces de nuestra espiritualidad paulina y no caer en la tentación de decir,
“bueno como son personas adultas y preparadas no necesitan mucho”. Nadie está
preparado para emprender un camino nuevo y si tenemos el deber de dar nuestras
raíces y espiritualidad a toda la humanidad con más motivo a nosotros que somos
los transmisores de dicho legado. Y desde allí estaremos más preparados para
dar al mundo a Jesús Maestro, Camino, Verdad y Vida como lo vivió San Pablo y
como lo vivió María Reina de los Apóstoles.
Siempre he sentido a las
Anunciatinas de Italia como nuestras madres ya que ellas llevan desde el 1958
cuando el Beato Alberione empezó a reunir a chicas en conferencias y retiros
para comenzar la tarea del nuevo Instituto Agregado María Santísima de la
Anunciación (IMSA). Ellas nos podrían haber ayudado mucho sobre todo en
nuestros primeros pasos aquí en España que comenzamos en el 1980. Decía
Guadalupe, nuestra primera anunciatina, que tenía que decirles a las jóvenes
“quien es una anunciatina” cuando ni siquiera ella lo tenía claro. Aunque en mi
propia vida de anunciatina, con tropiezos y andaduras, siempre he sentido cerca
al Beato Alberione como si me condujera por el camino emprendido.
María Dolores Andréu, IMSA
En la Casa de las Anunciatinas en Italia
De España: Mayte ISF, Loli A IMSA, y de Perú: Marieta
P. Maroño, Delegado de los Institutos en España.
En la sesión de trabajo