lunes, 22 de junio de 2020

Mes de San Pablo - día 22

SAN PABLO NOS AMA
Gran cosa es saber que san Pablo, con sus oraciones, puede obtenernos cuanto necesitemos. Surge entonces espontánea otra pregunta: ¿Pero este santo, nos quiere, piensa en nosotros, se ocupa de cada uno?– Sí, respondo; y mucho.
Un padre ama a sus hijos, un apóstol a quienes ha evangelizado, un maestro a sus alumnos. Y bien, san Pablo es nuestro padre por ser nuestro patrono especial; nosotros le hemos escogido como padre de adopción, y él nos ha aceptado como hijos adoptivos; y con sus hijos quiere hacer de padre, como escribía a los fieles de una de las Iglesias fundada por él: Recuerden que aunque tuvieran muchos maestros, sólo yo soy su padre porque os engendré a la gracia del Evangelio. San Pablo es el apóstol encendido en amor a las almas; ya en esta tierra vivía para ellas y sus Cartas están llenas de las más | tiernas expresiones de afecto. Ahora él nos instruye a nosotros. La doctrina que aprendan es suya; lo que se os dice está casi siempre tomado de sus Cartas; él nos amaestra con el esplendor de sus ejemplos. ¡Cuánto afecto, pues, no nos tendrá en el paraíso!
¡Qué gran consuelo es este para nosotros! Somos pobres y pecadores, no mereceríamos del Señor más que castigos; pero entre el Señor y nosotros hay un gran santo que perora nuestra causa, nos defiende, intercede, piensa en nosotros más de lo cada uno puede pensar en sí mismo. San Pablo tiene un ojo escrutador, miradas vivaces, casi impetuosas; pero en el fondo están llenas de aquel afecto robusto y profundo que le llevaba a escribir: «Yo quisiera dar mi vida por ustedes». ¡Sí, qué gran consuelo! San Pablo nos ama, está completamente por nosotros, interesado a favor nuestro.
Obsequio: Con un gesto concreto, manifiesto a un ser querido el amor que le tengo, como reflejo del amor de Cristo
Jaculatoria: San Pablo apóstol, protector nuestro, ruega por nosotros y por el Apostolado de las Ediciones.