¡Oh, Llave de David!
¡Corazón ancho, aspiraciones
santas, confianza en Dios!
santas, confianza en Dios!
Tengan en su corazón propósitos
grandes y sepan que el Señor quiere
darles cosas grandes y sublimes.
Pero se necesita tener confianza
en Dios, creer que el actuará en
nosotros y completará nuestras
obras de religiosos.
Beato Santiago Alberione