En algunas casas lo característico es
siempre la sonrisa; se ve serenidad en ellas;
se siente que hay de veras un ambiente
paulino, cordial de mutuo rendimiento, de
ayuda reciproca y constante. Allí habita el
Señor y las hermanas habitan con él
(FSP - SdC, p.335)
Beato Santiago Alberione