Puede ser que tenga que desempeñar un cargo muy alto y puede ser que tenga que desempeñar un cargo muy bajo, pero eso no importa absolutamente nada... [Lo que importa] es el compromiso, es el amor de Dios que se pone en las cosas, es el querer hacerlas sólo para él con sencillez y, al mismo tiempo, empleando todas las fuerzas que hay (APD56, 171).
Beato Santiago Alberione