Están llamados a comprender los deseos del corazón de Jesús... Tienen ese Sagrario abierto y desde allí sienten la invitación a ser cada vez más íntimos [de Jesús] y cada día sienten el impulso a obrar mejor, a avanzar en perfección, a acoger los tesoros de la ciencia y de la santidad que les llegan desde el Sagrario (FSP32*, 283).
Beato Santiago Alberione