Hoy la Familia Paulina hemos estado celebrando , junto a toda la Iglesia, la fiesta de la conversión de San Pablo.
Nuestro Fundador el Beato Santiago Alberione nos daba las motivaciones para celebrar la conversión de San Pablo:
Además de dar gracias al apóstol, nuestro padre, maestro, modelo y doctor, pues todo se lo debemos a él.
Conocer mejor al Apóstol en sus cartas en su vida en sus obras y en la liturgia.
Imitarlo en sus virtudes, especialmente santificando todo lo que nos lleva a una definitiva conversión: examen de conciencia, sacramento de la reconciliación, lucha interior por vencer al hombre viejo y permitir que viva Jesucristo.
Rezarle para que se aleje definitivamente el pecado, todo pecado; para que todas las fuerzas y energías se orienten hacia el Señor con una entrega total, para que estas energías de la mente, la voluntad y el corazón se potencien, como en el caso de san Pablo, por la gracia extraordinaria que lo impulsaba a decir, "todo lo puedo en Aquel que me conforta" (Flp 4,13)"